El proyecto consistió en la estabilización de los taludes rocosos que presentan fractura y desprendimientos de materiales. En los taludes fue necesario realizar un tratamiento de protección en toda el área del deslizamiento contra la erosión y el desprendimiento de bloques que puedan provocar inestabilidad, así adicionalmente se requirió una estabilización con anclajes más profundos en una zona específica del talud para brindar una solución con mayor nivel de seguridad.